Krystina: el mejor remedio que hay es, como diría mi madre, un pellizco en los hu***os.
Polloyvaca: lo de los radares es otro de los motivos, y cada día más, que me quita las ganas de correr. ¡Hasta respeto las "zonas 30" de Barcelona!
Garpansoro: a mí me pasa lo mismo, por carreteras con curvas, me gusta darle alegría al cuerpo y al coche, pero en autopista o carreteras rectas... no le veo la gracia.
De todas formas, he comprobado varias veces que dos coches que salgan juntos del mismo sitio y uno circule a 120-130 y el otro a 140-150, cuando dicen de quedar en algún sitio, la diferencia de tiempo es insignificante. Por ejemplo, si quedan en una gasolinera, cuando el más lento llega, el más rápido está cogiendo todavía la manguera del surtidor. Pensad que no es una velocidad lineal, sino que hay que acelerar, disminuir la velocidad hasta poder adelantar, subir puertos, parar en peajes, etc.
