Bienvenido al club...
Al lado de la plaza de mi mujer (que la tiene alquilada) aparcan hasta 4 coches distintos de la misma familia: una Berlingo, un Toledo un VW CC y un Corsa, dependiendo de si vienen los hijos de visita o no. Para más "inri" la "mamá" tiene en casa 3 perritos cocker spaniel que lleva de concurso en concurso con la Berlingo y no hacen más que ir y venir. Todos aparcan atravesados y "a su caer" (el del VW CC lo deja mejor, pero porque al ser un "transatlántico" y estar nuevo, no le queda otra). Eso sí, los demás los dejan sin llegar hasta la pared y con medio culo fuera...
Menos mal que el nuestro es un fiesta y ocupa poquito. Total, que no sé si es con la furgo o con todos los demás, la puerta del conductor de nuestro coche está llena de picotazos, y eso que aparcamos bien pegaditos atrás y a la columna (dejando unos 30 cm hasta la raya de separación), pero no sé si abren a lo bestia de par en par o qué (para que suban los chuchos, supongo), que nuestro coche lo tienen mártir. Me estoy planteando echárselo en cara (con bronca segura, fijo), pero claro con la luz del garaje los daños ni se ven, es a la luz del día donde se hacen evidentes y estoy 100% seguro de que lo negarían todo...
Pero es que no son los únicos: al lado de mi zafi aparca otro vecino un Octavia que me obliga a aparcar "con calzador". Un día se acercó tanto a la línea que para salir después de aparcar me raspé todo el cuerpo con la puerta porque apenas cabía mi cuerpo "serrano". Le dejé una notita: "Estimado vecino, le ruego que procure aparcar dejando al menos un palmo hasta la raya, pues me ha costado horrores salir hoy del coche". Al día siguiente se presenta el vecino de la puerta de enfrente con el papelito en la mano y diciendo que es que las plazas son de por sí pequeñas... "Ya, pero dejando ese margen que te digo pasas de sobra entre tu aleta y la columna, que lo he comprobado en persona. Además, no te cuesta nada dejar recta las ruedas, que más de una vez mi hijo se ha comido la de este lado (y el espejo) al llegar al coche"...
Total, que acabamos a gritos en el portal y faltó el "canto un duro" para llegar a las manos. Sigue aparcando bastante pegado a la raya, aunque sin pasarse tanto como aquel día, y al menos ahora deja las ruedas alineadas, pero en el portal nos evitamos y ni nos hablamos al cruzarnos... hasta la siguiente veremos...