Hola a todos:
Aunque parte ya lo han comentado, voy a intentar ampliar la contestación.
En primer lugar, generalmente las condiciones de los contratos del servicio ADSL y las leyes 'obligan' al usuario a poner todo de su parte para proteger las comunicaciones e impedir un uso fraudulento (dicho de forma resumida). Es decir, que tú eres responsable de tu conexión y de aquello que se haga a través de ello. Alguien se asustará de esto que estoy diciendo, pero si alguna vez leeis simplemente la política de cualquier portal web quedaréis alucinados de lo que estáis aceptando 'implícitamente'. Por supuesto que en un juicio habría que ver si son cláusulas abusivas, etc, etc.
Desde el punto de vista del que 'se deja robar' la conexión:
- Está obligado a protegerla. Y si no lo hace, puede ser responsable de lo que se haga a través de dicha conexión.
Desde el punto de vista del que la utiliza:
- Aquí hay más ambigüedad. En principio sí que podría considerarse 'robo de señal' en toda regla, con lo cual podría ser un delito. Si seguimos por este punto, por supuesto que el usuario 'que cede la señal' puede saber perfectamente quién se está conectando. Otra cosa sería aportar pruebas con validez, pero se podría llegar a ello, capturando la información que pasa por el router.
Ahora bien, siempre me gusta plantear la pregunta desde el otro punto de vista. ¿Y si el usuario ha dejado abierta su red con el fin de realizar un uso malintencionado? Es decir, en busca de víctimas para capturarles información (el viejo truco del cazador cazado) relevante, o directamente acceder al disco duro de su información... pensad que en el momento que os conectais por la red de un 'vecino' ya estáis formando parte de su red local, y de ahí a acceder a vuestro ordenador hay un paso...
En este punto la mayoría de los ordenadores no os protegerán, y con un poco de suerte lo único que os podría salvar sería un buen firewall (aunque os aseguro que ni con esas, pero no vamos a entrar en cuestiones demasiado técnicas). Solo la instalación de un IDS (sistemas de detección de intrusos) podría monitorizar esto, pero no es lo habitual
Conclusión:
1. no es oro todo lo que reluce, y no penséis que todas las conexiones abiertas lo están porque el que la paga es un pardillo...
aunque en muchas ocasiones es por desconocimiento de los usuarios...
2. El hecho de proteger una red inalámbrica no la 'asegura' nunca al 100%. Esto para los más técnicos... se protege el protocolo TCP, pero que pasa si abrimos un tunel UDP?
Por supuesto que a mejor protocolo de 'protección' mejor. Traduciendo, mejor WPA que WEP si podéis.
3. Deberíamos SIEMPRE cifrar la información que enviamos a través de internet, aunque sea a traves de nuestra propia conexión (no digamos si es 'robada'). ¿escribís postales para enviar información confidencial? pues la mayoría lo hace diariamente con sus correos electrónicos... pensad en ello.
Bueno, vaya tocho que me ha salido, pero espero que aclare cuestiones.
Saludos a todos.