Buenos días (por decir algo).
Feliz de la vida estaba yo con mi flamante Zafira del 2015. Ningún problema más allá del susto que te llevas cuando tienes que cambiar las ruedas. Contentísimo con mi taller oficial Opel y sus revisiones periódicas con un precio correcto para la calidad del servicio que ofrecía.
Hasta ayer, que 5 minutos tras haber salido de casa, se enciende el testigo ROJO de aceite y aparece el mensaje de "Baja presión de aceite en el motor. Detenga el vehículo".
Por supuesto, detuve el vehículo inmediatamente, no sin antes colocarme de corbata mis pequeñas gónadas, fruto del susto y el frío que hacía.
Llamada a la grúa y traslado al taller oficial.
Hoy, las buenas nuevas... "Hola Leddron!, Te llamo de tu taller Opel. Oye, ¿Recuerdas tu zafira? ¿Esa que trajo ayer la grúa? Pues resulta que tiene daños internos del motor, y necesitamos tu autorización para desmontarlo y ver que le pasa"
Imaginad el escalofrío en la espalda, tras semejante noticia, en un coche que NO TIENE NI 4 AÑOS!
Os parece normal?
Os seguiré contando el drama