El pasado día viernes 29 de Enero (vísperas de mi cumpleaños) me levanté con mucho dolor de espalda, y me quedé toda la mañana acostado "porsiaca". A la hora de comer, me fuí a la cocina y mientras comía me dió un tremendo tirón en la espalda a la altura de las lumbares, donde me operaron. El dolor era insoportable, y no podía moverme. Me entraron mareos, ganas de vomitar y no me podía mover absolutamente nada. Mi mujer tuvo que llamar al 061, que vinieron y me sedaron y me llevaron en ambulancia al hospital.
Tras estar allí toda la tarde y después de hacerme radiografías, el resultado es que de la operación parece que no se ha desplazado ninguna placa pero no me dijeron a qué se debía la crisis tan grande que me había dado. He estado una semana entera sin poder moverme de la cama hasta hoy que estoy un poco mejor y me he atrevido a acercarme al ordenador. Ya he quedado con el cirujano que me intervino para este miércoles que viene, haber qué me cuenta. La crisis que me ha dado ha sido la peor de todas las que he sufrido, y han sido unas cuantas ya.
Bueno, pues estoy un poco desesperado por todo esto porque ya no sé qué más me van a hacer, pero lo único que me recomiendan y lo único que me queda también es tener paciencia.
En fin, ya iré contando novedades.