Hola a todos. Pues lo que le ha dicho el jefe de taller de Opel a racuta no es nada descabellado. En efecto, al cerrar alguna de las puertas y más aún el portón trasero, que tiene un tamaño considerable, se genera un efecto pistón que comprime el aire del interior del coche y dificulta su cierre. Para evitarlo, todos los vehículos cuentan con unos aireadores colocados por dentro del paragolpes trasero, que mediante unas compuertas de goma permiten la salida del aire pero no la entrada de polvo, y de unas rejillas generalmente en las tapas para cambiar las bombillas de los pilotos traseros, a través de las que se expulsa el aire para facilitar tanto el cierre de las puertas como la correcta ventilación del habitáculo. La obstrucción de cualquiera de estas rejillas o de los propios aireadores puede ocasionar dificultades en el cierre de las puertas, por lo que conviene revisarlas si se observa que no cierran bien.
También puede haber problemas con el ajuste del portón, puede tener mal ajustado el cerradero o los topes de goma que tiene a los lados y que apoyan en unos redondeles sobre los pilotos, pero en este caso el portón siempre cerraría mal, tanto si se hace deprisa como despacio.
En mi opinión es mejor empujarlo para después dejarlo caer suavemente, hace menos ruido y siempre cierra bien, por lo menos el mío.
Un saludo.